Air Nostrum expande su negocio al resto de Europa tras
abrir mercado en América
El presidente de Air Nostrum y Ilai, Carlos Bertomeu. / EFE/BIEL ALIÑ
La compañía también aspira al servicio de extinción de incendios para el
Consell, aunque el concurso deberá cambiar para aceptar sus aviones
Valencia. Los socios de Air Nostrum, encabezados por su presidente, Carlos
Bertomeu, están decididos a convertirse en un operador aéreo europeo, después
de reforzar sus posiciones en América. A través la sociedad Inversiones Líneas
Aéreas Internacionales (Ilai), Bertomeu y sus socios Antonio Pellicer y José
Remohí, fundadores del IVI, han completado en año y medio la estructura de un grupo
empresarial de aviación y ferroviario global.
Una de las últimas decisiones es la fundación de Hibernian Airlines,
constituida en Irlanda. El objetivo no es operar como una compañía al uso, sino
que aportaría aviones y tripulación para terceros del Norte de Europa. Bertomeu
explicó que se trata de cubrir las puntas de demanda, lo que obliga a pasar en
unos meses de cinco aviones con tripulación a ninguno. Por el momento, ya están
trabajando con SAS, Scandinavian Airlines, a modo de prueba, pero como Air Nostrum,
ya que la licencia de Hibernian (Irlanda en gaélico) está en tramitación. Al
mismo tiempo, buscan un socio que les ayude a impulsarla el proyecto.
A su vez, ayer se firmó la adquisición del 51% del accionariado de Medavia,
una compañía de Malta que era propiedad de un fondo soberano libio que
necesitaba un socio comunitario por exigencia de la Unión Europea. Su trabajado
habitual son los vuelos corporativos para petroleras y otros servicios, además
de cubrir el Magreb y el Este de Europa, donde Air Nostrum no tenía presencia.
También cuelgan de Ilai la empresa de 'leasing' de aviones Saimer, fundada en
Irlanda en 2015 con tres aeronaves, y que hoy ya suma ocho y prevén pasar a 10.
La política del grupo es tener los aviones en arrendamiento operativo para
así externalizar riesgos y no cargar en Air Nostrum los posibles impagos. Sus
clientes serán otras aerolíneas, pero también ellos mismos y sus filiales
Flyest en Argentina y Amaszonas del Paraguay, para las que cuenta con su centro
de reparaciones, Anta, en Paraguay.
Por otra parte, sigue su curso el proyecto para dar servicios ferroviarios
de alta velocidad nacional e internacional cuando se liberalice en Europa en
2020. La firma Ilsa ya dispone de los permisos y negocia captar nuevos socios
financieros, además de la adquisición de los trenes.
Petición
a la Generalitat
Otra rama de Ilai es la extinción de incendios, para la que se constituyó
hace un año Planificación y Soluciones Aéreas (Plysa). Con ella piensa
presentarse a los concursos pequeños o fraccionados que hacen comunidades
autónomas como la valenciana. Bertomeu pide al Consell que se cambie las
actuales bases de adjudicación del servicio para que se adapte a los aviones
que piensa incluir en su oferta, Thrush 710P, más pequeños que los actuales Air
Tractor, y que están pendientes de certificación en España.
Según Bertomeu, quieren innovar con aviones más modernos, más pequeños y
ligeros, además de introducir el uso de drones. No descarta probar suerte
también en Francia, Portugal, Marruecos o Argentina. Estima que en enero de
2018 tendrán licencia y pronto buscarán pilotos. La relación de la compañía con
la Generalitat es larga y no está exenta de polémicas, la última de las cuales
es la adjudicación directa de tres millones de euros en ayudas de los
Presupuestos de 2018.
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